La escultura, de cuatro metros, se debe a un proyecto del artista plástico autodidacta Andrés Zerneri, quien visiblemente emocionado declaró que es el resultado de una obra colectiva.
Me toca hoy -expresó desde la plataforma del camión que transportó la hermosa figura- ser la cara visible por haber lanzado la iniciativa, pero sin el apoyo de mucha gente no hubiera sucedido nada.
Explicó que cuando concibió la idea de realizar el monumento a partir de llaves y pequeños objetos de bronce donados voluntariamente por las personas comunes estuvo un poco pesimista, pero en dos años y medio se rebasaron todas las expectativas porque llegaron de casi todo el mundo.
Dijo que la idea nace de su admiración política por el Che y su empeño de sumar voluntades para realizar proyectos, y en ese sentido concibe el arte, o sea, forjar una obra con el concurso de todos, como aconteció con esta estatua.
La manifestación, integrada fundamentalmente por jóvenes, enarboló banderas argentinas, numerosas telas rojas con la efigie del comandante guerrillero, banderas cubanas y una enorme tela, también roja, con la ya histórica frase de ¡Hasta la victoria siempre!
La caravana que atravesó numerosas arterias capitalinas, entre ellas la famosa Avenida Corrientes en toda su extensión de varios kilómetros, fue también un homenaje a los cinco patriotas cubanos injustamente encarcelados en Estados Unidos por luchar contra el terrorismo.
El autor del proyecto escultural portó durante todo el recorrido una pancarta con sus fotos y una inscripción denunciando la injusticia.
En varias intercepciones del recorrido por Corrientes, como en las populosas Dorrego, Scalabrini Ortiz, Medrano y Callao, los transeúntes detuvieron su paso para saludar la caravana y muchos jóvenes subieron a la plataforma para incorporarse.
La estatua muestra al Che Guevara en pie, con la frente en alto, la mirada fija, el pelo largo al aire, luciendo ropa verde olivo de campaña y la conocida boina con la estrella de cinco puntas.
En la base, quedaron fundidas algunas llaves como tributo a las casi 14 mil 500 personas de todo el mundo que entregaron más de 75 mil de esas piezas para juntar las tres toneladas de bronce necesarias para realizar la escultura.
Funcionarios de la Embajada de Cuba en Argentina estuvieron en la manifestación para saludar a Zerneri y acompañar la ceremonia de traslado.
Mañana al mediodía, en el puerto capitalino del Río La Plata habrá un acto de despedida antes de colocar la obra escultórica en un barco que la trasladará por el río Paraná arriba hacia Rosario, la ciudad natal del Che, donde será colocada en un monumento que se inaugurará el 14 de junio, día de su cumpleaños 80.
No hay comentarios:
Publicar un comentario